Y yo ¿Para qué evalúo? ¿Por qué?
El segundo módulo de este curso nos proponía como interrogante disparador la pregunta: ¿Para qué evaluar? Son muchas las respuestas posibles que iba ensayando, y al hacerlo me daba cuenta como intentando responder, se evidenciaban todas mis concepciones sobre la evaluación en sí misma. Concepciones que se han ido construyendo a partir de las vivencias y experiencias que he transitado durante mi formación, las que manifiesto defender desde mi posicionamiento como docente, y las que a veces sin notarlo emergen y contradicen un poco mi propio discurso.
El proceso que fuimos realizando a lo largo del módulo, me ha permitido poner en valor y analizar estas ideas, tanto las propias como las de mis compañeras, las de todas las docentes a quienes entrevistamos. Al ir transitando la lectura de los materiales, fui descubriendo que muchas veces como docente pretendo posicionarme desde un paradigma de evaluación formativa pero no siempre lo logro por completo y muchas de las cualidades de este tipo de evaluación pueden ser pasadas por alto sin darme cuenta. En un principio me sorprendí, hasta me preocupé, pero luego observé esta misma realidad en otras docentes, y me ví reflejada en ellas.
Creo que si bien es posible que nos falte mucho por recorrer y trabajar para finalmente lograr proponer instancias de evaluación formativas, vamos por buen camino, porque realmente nos interesa y dedicamos tiempo, atención, momentos de investigación, debates, intercambios, y demás, con el fin de mejorar en ello. El paso por este curso, por este módulo en particular, me permitió acercarme y profundizar mi conocimiento en torno a este paradigma sobre la evaluación, saber a qué debo prestar más atención, de qué manera comunicar los resultados de aprendizaje esperados, ofrecer mis retroalimentaciones, la importancia de estimular procesos metacognitivos en mis estudiantes, de construir en conjunto con ellos los criterios de evaluación y sobretodo, pensar cómo todo el proceso evaluativo puede convertirse en un valioso insumo a la hora de ajustar mi propia práctica de enseñanza.
Las actividades que nos propusieron me resultaron muy interesantes y significativas. Disfruté de la construcción colaborativa de la encuesta junto a mis compañeras de equipo y me sorprendí mucho con los resultados obtenidos, analizando las respuestas, los supuestos que hay en torno a la evaluación y las concepciones que rondan el tema. También me sirvió mucho la aplicación de los protocolos de retroalimentación formativa, el poder poner en práctica esta forma de dar devoluciones y también el recibirlas por parte de mis compañeras, me fue útil para posicionarme en diferentes roles y analizar cómo ejercerlos de manera respetuosa, cálida, empática pero sobre todo con la intención de que la retroalimentación resulte formativa siempre. Sin dudas tomaré las sugerencias que recibí para mejorar mi propuesta de evaluación y buscaré al momento de ofrecerla a los participantes del curso, poner en práctica las nociones aprendidas durante este módulo.
Me siento muy motivada y con ganas de continuar aprendiendo sobre evaluación. ¡Veremos qué nos depara el siguiente módulo pero aquí vamos!
Gracias Fernanda por compartir tu reflexión. Que bueno que te hayan resultado significativas las actividades y sobre todo tus ganas de seguir aprendiendo. ¡Adelante que lo estás haciendo muy bien! 💪💪
ResponderEliminarCariños